Friday, April 26, 2024  |

By Tom Gray | 

LARRY HOLMESUSÓ SU CORAJE, SU INTELIGENCIA Y SU TREMENDO JAB PARA ESTAMPAR SU NOMBRE EN EL LINAJE DE LOS CAMPEONES MUNDIALES DE PESO PESADO 

Joe Frazier diezmaba oponentes con su gancho de izquierda. La terrible derecha de George Foreman imponía pánico en los corazones de la división de peso pesado. El uppercut de Mike Tyson fue tan certero como pulverizador. Pero para Larry Holmes, fue su jab zurdo preciso y dañino lo que lo llevó a lograr uno de los reinados más dominantes que se hayan visto en la división de los pesos completos. Realmente fue uno de los más exquisitos golpes vistos en ese peso. 

Holmes abandonó el amateurismo con un registro final bastante modesto de 19-3. En sus últimos dos combates como aficionado, durante las finales de la clasificatoria olímpica de 1972, el hábil y movedizo púgil de Easton, Pennsylvania fue noqueado por Nick Wells y descalificado por amarres excesivos ante Duane Bobick. Nadie, absolutamente nadie, veía a Holmes como un futuro campeón mundial, y muchos críticos lo veían como un cobarde. 

Al hacerse profesional en marzo de 1973, Holmes, de 23 años de edad, estaba esencialmente aprendiendo en el trabajo. Pero trabajaba duro en el gimnasio y recibía una invalorable experiencia como compañero de guanteos de profesionales más encumbrados, afilando sus capacidades ante boxeadores como Joe Frazier, Earnie Shavers y hasta el mismísimo Muhammad Ali.



Holmes vs. Cooney

«Ali no medía ni atenuaba sus golpes, pero yo sí lo hacía con él, porque él era el campeón y yo no quería lastimarlo», dijo Holmes, quien era aún un amateur cuando comenzó a guantear con el gran ex campeón en 971 y se mantuvo como una presencia constante en su equipo de trabajo hasta 1975. 

«La gente hubiese pagado dinero para verme a mí y a Ali guanteando. También hicimos una o dos exhibiciones cuando yo era más joven, una de ellas en Reading (Pennsylvania). Ese trabajo me hizo un mejor boxeador. Si trabajas con los mejores, te transformas en el mejor. Aprendí a tirar el jab, aprendí a lanzar la derecha y aprendí a que no me golpeen».

«La gente se enojó conmigo porque yo estaba ganando demasiado».

Para junio de 1978, Holmes había llevado su récord invicto a 27-0 (19 KOs) y había acumulado excelentes triunfos sobre temibles rivales como Roy Williams y su ex empleador, Shavers. La última de esas dos victorias puso a Holmes en el puesto No. 1 de retador de Ken Norton por el título del CMB de peso pesado, y así arrancó la guerra. Esto fue su bautismo de fuego. 

Holmes, con sus veloces manos, tuvo un tremendo inicio, lanzando jabs a voluntad sobre Norton y conectando combinaciones muy vistosas. Pero para mediados del combate, Norton estaba conectando bombazos y el retador estaba sangrando profusamente por su boca. Luego de una increíble batalla, que culminó en lo que seguramente es el mejor 15to round en la historia del boxeo, Holmes fue declarado ganador por fallo dividido. 

Luego de haber trabajado tan duro para obtener su premio, el nuevo campeón no estaba con ganas de abandonarlo. Holmes hizo 20 defensas exitosas en los siguientes siete años y medios. Entre sus víctimas se contaron Mike Weaver, Shavers, Trevor Berbick, Leon Spinks, Gerry Cooney, Tim Witherspoon y una decaída versión de Ali. A finales de 1983, Holmes cambiaría el título del CMB por la versión inaugural del título de la FIB, pero la política del boxeo era irrelevante. Holmes, quien también tuvo en sus manos el campeonato de The Ring desde 1980 en adelante, fue el mejor.

Holmes vs. Norton

En septiembre de 1985, el monarca semipesado Michael Spinks derrotó sensacionalmente a Holmes en Las Vegas. Ese traspié fue muy duro, por muchas razones. Holmes nació como ganador, y había quedado a solo una victoria de la legendaria marca de 49-0 establecida en la división por el ex campeón Rocky Marciano. Una versión rejuvenecida del ex campeón pareció ser suficiente para ganar una revancha ante Spinks en abril de 1986, pero los jueces (a cuyos colegas Holmes había despreciado después del primer combate) le fueron adversos. 

«La gente se enojó conmigo porque yo estaba ganando demasiado”, arriesgó Holmes, levantando la voz. «Estaban celosos de mí porque yo ganaba siempre. Dijeron que Larry Holmes no podía pelear, Howard Cosell y todos ellos. Pero él terminó creyendo en mí, y lo mismo pasó con todo el resto. Tú también crees en mí, ¿verdad?».


‘The King and I: The Greatness of Larry Holmes’


Quienquiera que conozca el deporte del boxeo es un creyente cuando le hablas de Larry Holmes. Ese deseo irrefrenable por probarle a la gente que estaban equivocados es lo que lo transformó en un gran boxeador. 

Holmes intentó alzarse con el campeonato tres veces más, pero se quedó corto. Fue noqueado por Mike Tyson en 1988 y superado por puntos por Evander Holyfield y Oliver McCall en 1992 y 1995, respectivamente. El gran ex campeón peleó hasta sus 52 años, retirándose para siempre con un registro de 69-6 (44 KOs).

Aquí les ofrecemos una retrospectiva por los grandes éxitos del Asesino de Easton:

 

30 de abril de 1976/ Capital Centre, Landover, Maryland; Títulos: Sin títulos en juego

«Roy Williams era un tipo grande, medía como 2.05 metros, y muy, muy fuerte. Yo sabía que tenía que boxearlo bien, porque ya había trabajado con él antes (en los guanteos). Él golpeaba duro – no muy duro, pero era fuerte por dentro. Tuve que quedarme alejado y trabajarlo, sin quedarme parado ahí. En un momento, Williams era considerado una promesa de alto nivel, pero no pudo conseguir una chance de título mundial porque nadie quería enfrentarlo. La única razón por la cual peleé con él fue porque el (promotor) Don King me dijo que lo hiciera. No creo que Don esperase que yo ganara, pero yo sabía que podía superarlo en boxeo, y eso fue lo que hice. (Muhammad) Ali hizo la pelea principal de la noche, ante Jimmy Young, y yo vi todo el combate. Jimmy boxeó, se movió, y cuando Ali se acercaba él lo amarraba. No logró la decisión porque todos amaban a Ali. Jimmy Young necesitaba un nocaut para ganar esa noche». 

Resultado: Holmes DU 10

 

25 de marzo de 1978/Caesars Palace Sports Pavilion, Las Vegas; Títulos: Sin títulos en juego

«Yo sabía que podía ganarle a Earnie. Sabía que se quedaría sin estamina después de cuatro o cinco rounds, por eso simplemente tuve que boxearlo. Fue mi primera pelea a 12 asaltos, peleé a mi propio ritmo, y no quería involucrarme en una guerra. Uno no sale a pelearle a un tipo así, hay que boxearlo, boxearlo y boxearlo. Tenía que ganar, y por eso lo superé en boxeo, porque él era fuerte y estaba siempre listo para pelear. Yo guanteé con Earnie y sabía lo buen pegador que él era. El dinero era muy bueno para guantear con él en el gimnasio, y yo hice ese trabajo. Era otro de los tipos con los que yo no quería pelear, pero tenía que hacerlo si es que quería que me den una chance de título mundial. Durante cuatro o cinco rounds ante Earnie, estás en problemas, por eso necesitas boxear y mantenerte alejado. Esa es la única manera de ganarle». 

Resultado: Holmes DU 12

 

9 de junio de 1978/Caesars Palace Sports Pavilion, Las Vegas; Títulos: Peso pesado, CMB

«Norton fue a pelear, y fue la pelea más dura que yo haya tenido. Cuando peleé con Shavers, no fue ni siquiera parecido. Cuando peleé con Cooney, no fue ni siquiera parecido. También pasó que era una noche muy calurosa, y yo perdí más de tres kilos en una hora durante esa pelea. Yo estaba decidido a ganar, y eso fue lo que me llevó a aguantar hasta el 15to round. Él me presionaba… Yo lo presionaba… Él me ponía más presión… Yo se la devolvía. Yo pensé que estaba ganando la pelea desde el comienzo, porque yo usaba mi jab, lo superaba en boxeo y me mantenía en movimiento. No sabía que la pelea estaba tan cerrada (entrando al 15to round), pero me quedé con la victoria, y estaba feliz. Toda mi vida me habían menospreciado. ‘Larry no es nada, y nunca va a ser nadie’. Les probé a todos que estaban equivocados, y la victoria fue dulce». 

Resultado: Holmes DD 15

 

2 de octubre de 1980/Estadio al aire libre, Caesars Palace, Las Vegas; Títulos: The Ring y peso pesado del CMB

«Mentalmente fue algo muy duro, porque yo no quería lastimarlo. Yo sabía lo que Ali podía hacer, y sabía lo que yo podía hacer: Había trabajado con él durante tanto tiempo, habíamos guanteado cientos de rounds juntos, durante años, por eso yo sabía todo de él. Él era mi amigo, pero yo no podía dejar que la emoción me gane. No quería lastimarlo, por eso boxeé y apuntaba a ganar por puntos. En el ring, es a matar o morir, pero aun así no quise lastimarlo esa noche. No soy un mercenario. Yo no soy ni George Foreman ni Joe Frazier, tipos que buscan matarte con un solo golpe. Jody Ballard (ex retador al título de peso pesado y compañero de guanteos de Holmes) dijo alguna vez que yo era el tipo más feroz en el ring, pero lo que Jody quiso decir es que yo me lo tomaba en serio. Yo puedo boxear y puedo pelear – no quiero lastimarte, pero si tratas de lastimarme te voy a lastimar yo también». 

Resultado: Holmes KOT 10

 

12 de junio de 1981/Joe Louis Arena, Detroit; Títulos: The Ring y peso pesado del CMB

«Fue un placer pelear con Leon. Antes que nada, yo soy boxeador. Y salgo ahí a hacer lo mejor que puedo. Solo que no tienes que cruzarte la línea conmigo, no me insultes, no me faltes el respeto, ni a mí ni a mi mujer ni a mis hijos. ¡Eso no se hace! Yo sé que me quieres ganar, pero si es así vamos al ring y ahí me pateas el trasero, si puedes. Leon me puso nervioso antes de la pelea, y yo dije ‘OK, ahora te voy a noquear’. Por su estilo, él estaba hecho para mí. No mide 2 metros, no boxea ni se mueve hacia los lados. Leon viene y te atropella de manera frontal, y si tu vienes de frente, te tengo en la mira. Leon vino directo a mí como Joe Frazier, y está claro que Leon no es Joe Frazier. Le di una paliza a Leon como si fuese un niño». 

Resultado: Holmes KOT 3

 

11 de junio de 1982/Estadio al aire libre, Caesars Palace, Las Vegas; Títulos: The Ring y peso pesado del CMB

«Si no noqueo a Gerry, yo pierdo esa pelea. Me estaban haciendo todo lo posible para que pierda. Iban a hacer lo que fuera. Me pusieron una bomba en mi casilla de correo, me decían ‘negro de mierda’. Hubo mucha basura. Y te digo más, ¡la gente todavía lo hace! Hasta el día de hoy, hay gente que pasa por mi casa y me grita ‘¡vete a tu casa, negro sucio!’. Pero yo estoy en mi casa. Esta es mi tierra, ¡y el que se va al carajo eres tú! Ellos no quieren recordar mi pelea con Gerry Cooney. No quiero ni recordar cómo me trataron antes de esa pelea. Estoy seguro que Gerry Cooney no quiere recordar cómo me trataron antes de esa pelea. Gerry no quería que la gente actúe así. Pero está lleno de imbéciles ahí afuera, y a ellos no les importa. Yo estuve con Gerry el otro día, vino a visitarme para el cumpleaños de mi hijo». 

Resultado: Holmes KOT 13

 

20 de mayo de 1983, Dunes Hotel y Casino, Las Vegas • Títulos: The Ring y peso pesado del CMB

«No me sorprendió que la pelea con Witherspoon fuese cerrada, porque yo estaba preparado para cualquier cosa que pasara en el ring. La única sorpresa para mí es que no me respetó. Fue una pelea difícil, cerrada, pero yo pensé que gané. Si voy a ser honesto, diría que entrené demasiado para esa pelea. Mi peso estaba realmente bajo (Holmes pesó 2113 libras, y ya nunca pesaría tan poco en su carrera profesional) y definitivamente entrené más de lo debido. Para ese momento, yo había sido campeón por demasiado tiempo y (el sistema) me quería sacar. Ellos no lograban controlarme. La prensa me veía como un mal tipo, y ellos criticaban todo lo que yo hacía. Si Larry Holmes hace algo, entonces tiene poca clase, y odio esto y odio esto otro. Si Gerry Cooney hace algo, está todo bien». 

Resultado: Holmes DD 12

 

7 de febrero de 1992, Convention Center, Atlantic City; Títulos: Sin títulos en juego

«Esa fue una buena pelea. Yo no estuve tan concentrado como en mis mejores días, pero fue suficiente para ganar, y fue una gran pelea. Yo peleaba por el dinero. No peleaba para ser el campeón mundial de peso pesado, peleaba para alimentar a mi familia. Yo quería asegurarme de que tenía algo para cuando terminara de pelear. Cuando firmé el contrato, lo que tenía en la mente era el dinero. No me tomen a mal. Nunca pensé en perder, esa palabra no estaba en mi vocabulario. Yo no pierdo. Nadie quiere a los perdedores. Pero les diré algo. Ahora mismo tengo 69 años, y si me dan suficiente tiempo podría pelear de nuevo. Soy tan bueno ahora como lo era a mis 42 años. Puedo ganarles a estos tipos. Con los campeones que hay hoy, si me dan dos meses para entrenar les gano a todos». 

Resultado: Holmes DU 12