Friday, March 29, 2024  |

By Thomas Hauser | 

JABS Y RECTAS DE PUÑO Y LETRA

Campeones de peso pesado en prisión

Cientos de boxeadores notables han cumplido sentencias muy largas en prisión. Pero la lista se hace más acotada cuando la limitamos a los campeones de peso pesado que pasaron largos tiempos «a la sombra». No estoy hablando de John L. Sullivan, quien visitó varias comisarías en numerosas ocasiones por intoxicación en público y por pelearse tanto dentro como fuera del ring. Ni estoy haciendo referencia a campeones como Michael Moorer, Oliver McCall y Hasim Rahman, quienes tuvieron sus problemas con la ley. Estoy hablando de campeones de peso pesado que pasaron mucho tiempo tras las rejas. Veamos de quiénes estamos hablando.

JACK JOHNSON: En 1913, Johnson fue condenado por transportar a dos mujeres de un estado a otro para ‘propósitos inmorales’ y, como punto culminante de una campaña en su contra, recibió una condena de un año y un día en prisión. Se escapó mientras estaba en libertad bajo palabra, se marchó del país, y luego de pasar siete años en el exilio regresó a los Estados Unidos y se rindió ante agentes federales para servir 10 meses de cárcel en Leavenworth.

Jack Johnson, aquí en Paris junto a su esposa Irene Pineau, es uno de los muchos campeones mundiales de peso pesado que pasaron algo de tiempo tras las rejas.

ROCKY MARCIANO: Mientas estaba asignado a Inglaterra durante la 2da Guerra Mundial, Marciano y otro soldado robaron a dos ingleses, y les dieron una paliza también. Fueron enviados a corte marcial y condenados, tras lo cual Marciano fue dado de baja deshonrosa del Ejército y fue sentenciado a tres años de cárcel. Fue liberado 22 meses más tarde y se le permitió unirse nuevamente al ejército durante el resto del año 1946 para finalmente recibir una baja honorable.



SONNY LISTON: El currículum de Liston antes de comenzar a boxear profesionalmente incluye un encarcelamiento prolongado por una larga lista de delitos violentos, incluyendo robo a mano armada (28 meses en prisión) y ataque a un oficial de policía (nueve meses). «El boxeo», diría luego el periodista Jimmy Cannon, «le daría a Liston la oportunidad de conocer a delincuentes de alto vuelo en lugar de ladrones de poca monta».

MICHAEL DOKES: Luego de cumplir con una probatoria de dos años tras una declaración de culpabilidad por tráfico de cocaína, Dokes se pasó ocho años tras las rejas luego de declararse culpable de acusaciones de intento de asesinato, secuestro, golpes e intento de cometer ataques sexuales contra su novia. Las lesiones de la mujer eran tan severas que, según el reporte policial, la víctima no pudo ser identificada con la foto de su licencia de conducir.

TREVOR BERBICK: Berbick se pasó 15 meses en prisión en Florida luego de ser condenado en 1992 tras violar a una mujer que trabajaba como niñera para su familia. Al momento del crimen estaba en probatoria por atacar físicamente a un ex gerente de negocios.

MIKE TYSON: Tyson se pasó tres años en la cárcel (del 26 de marzo de 1992 al 25 de marzo de 1995) en Indiana luego de ser condenado por violación y conducta sexual inapropiada. En 1999 regresó a prisión (esta vez en Maryland) por 108 días luego de atacar a dos conductores tras un accidente de tráfico menor.

RIDDICK BOWE: Bowe fue condenado en 1998 por secuestrar a su esposa e hijos usando un cuchillo, bajo la ilusión de que ésto llevaría a una reunión familiar tras una separación. Luego de una confesión terminó purgando 17 meses en prisión.

Y hubo uno más que fue dejado en suspenso por la justicia…

En 1967, Muhammad Ali fue condenado por rehusarse a ser reclutado por las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos, y fue condenado a cinco años de cárcel. En última instancia, su condena fue revertida por la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos. Pero cuando la apelación de Ali estaba pendiente, fue sentenciado a 10 días de cárcel en el Condado Dade de Florida por manejar sin una licencia de conducir válida.

«La cárcel no es un buen lugar», diría Ali años más tarde. «Yo estuve ahí por más o menos una semana hasta que nos dejaron salir para Navidad, y fue horrible. Estás encerrado. No puedes salir. La comida es mala y no hay nada bueno para hacer. Miras por la ventana y ves autos y gente, y todos parecen estar haciendo algo en libertad. Las pequeñas cosas que uno da por hecho, como dormir bien o caminar por la calle, eso uno ya no puede hacerlo. Un hombre tiene que estar muy decidido en sus creencias para decir que se someterá a eso durante cinco años, pero yo estaba listo para hacerlo».

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La victoria de Manny Pacquiao sobre Keith Thurman a sus 40 años ha dejado abierta la siguiente pregunta: ¿Por qué tantos boxeadores mayores tienen éxito hoy en día?

El boxeo siempre ha sido un deporte de jóvenes. Archie Moore desafió las expectativas a finales de los 1950’s y comienzos de los ‘60s al competir al más alto nivel pasados ya sus 40 años de edad. Hace 24 años, George Foreman capturó un trueno en una botella al ganarle a Michael Moorer a sus 45 años. Pero Rocky Marciano se retiró a los 32 años. Y otros grandes boxeadores ya habían dejado atrás sus mejores años a esa edad.

En otros deportes, las estrellas son cada vez más jóvenes. En el boxeo pasa lo contrario. Miren si no el éxito que tuvieron tipos como Bernard Hopkins y los Klitschkos en años recientes. Miremos también a la élite de boxeadores de hoy. Vasiliy Lomachenko, Terence Crawford, Gennadiy Golovkin, Oleksandr Usyk, Mikey García, Deontay Wilder y Tyson Fury tienen todos más de 30 años.

«Te voy a contar por qué está pasando esto”; dice el veterano entrenador Don Turner. «Para empezar, a los boxeadores jóvenes no les enseñan las cosas correctamente. En todos los demás deportes, la enseñanza ha mejorado. En el boxeo sigue empeorando, por lo cual los boxeadores no aprenden a pelear hasta que son viejos, si es que algún día aprenden. En segundo término, los médicos pueden hacer cosas ahora para solucionar las lesiones y otras cosas que solían poner fin a la carrera de un boxeador. Y la mayor razón es que los boxeadores de antes solían hacer entre 10 y 15 peleas por año. Ahora pelean una o dos veces. Uno lee cosas de tipos de antaño que tenían cien peleas encima. ¿Sabes cómo se siente tu cuerpo después de haber peleado cien peleas?»

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¿Qué siente un promotor cuando realmente le parece que ha llegado a la cima de su profesión?

Robert Waterman, quien fuera promotor de carteleras del Reino Unido y media docena de otros países entre 1997 y 2012, recuerda que «mi momento de despegue fue un combate de campeonato mundial de peso crucero por EuroSport. Yo estaba en el ring antes de la pelea, sintiéndome bastante complacido, cuando sonó mi teléfono. Los boxeadores todavía no estaban en el ring, por lo cual atendí la llamada. Y lo primero que escucho es la voz de mi madre diciéndome ‘¡a ver si te metes la camisa dentro del pantalón, que luces como un vagabundo’!».

La dirección de correo electrónico de Thomas Hauser es [email protected]. Su libro más reciente, titulado «A Dangerous Journey: Another Year Inside Boxing», ha sido publicado por la editorial University of Arkansas Press. En 2004, la Asociación de Periodistas de Boxeo de Estados Unidos honró a Hauser con el Premio Nat Fleischer a la excelencia en el periodismo de boxeo.